Viaje a Barcelona

El Hogareño es la revista de la Escuela Hogar, en el tercer trimestre del año pasado, yo formé parte de su equipo de prensa. Esa misma revista fue premiada como una de las 15 mejores revistas juveniles de toda España, y, por eso, los alumnos que la hicimos fuimos invitados a Barcelona para exponerla en el Congreso de Prensa y Educación, en el que decidía cuál de las 15 se merecía el Lobo de Oro, Plata y Bronce 2008
Lo peor de este viaje fue que tuvimos que madrugar un poco, bueno un poco no, mucho, como que nos levantamos a las 5 de la mañana, y el viaje también fue muy largo y nos acompañaba Elena, la profesora encargada del taller de prensa.
Nada más llegar expusimos la revista, todos estábamos un poco nerviosos, pero al final salió bastante bien.
Después de la exposición, nos instalamos en el hotel, por fuera era muy chulo con jardines y esas cosas, pero las habitaciones eran un poco pequeñas, para ser de 2 personas, menos mal que tenían buenas vistas.
Por la tarde nos fuimos a un centro comercial que tenía muchas tiendas, como estaba al lado del mar tuvimos que coger el metro (nunca había cogido el metro y la verdad es que me gustó bastante), porque estaba en la otra punta de Barcelona.
Al día siguiente, teníamos una visita guiada por Barcelona y una señora llamada Amparo nos contó historias de sus monumentos más importantes,como la Sagrada Familia, también entramos al mercado de la Boquería (allí había muchas chucherías y cosas apetecibles), nos paseamos por las Ramblas, estaban llenas de hombres disfrazados, el que más me llamó la atención fue un Alien, parecía de verdad, y nos hicimos fotos con varios.
Por la tarde, hicimos una noticia digital de un monumento que habíamos visto por la mañana, a mí me tocó junto con Sheila redactar la Sagrada Familia, aprendimos muchas cosas de este monumento, como que Gaudí utilizaba a sus propios obreros de molde para realizar la fachada de esta.
Cuando terminamos nos fuimos a otro centro comercial y después de cenar nos fuimos a ver la película de “El curioso caso de Benjamín Button”, al cine. No pudimos terminar de verla porque era muy larga, y acababa más tarde de lo que pasaba el ultimo metro (las 2 de la madrugada), así que corriendo nos fuimos a coger el metro. Pero lo peor no fue eso, lo peor fue que teníamos que hacer transbordo de metro y yo no me imaginaba que los pasillos del metro podían ser tan largos, por unos segundos llegamos a coger el último metro, pero no hubiera sido así si no hubiéramos corrido tanto.
El último día se entregaban los premios, y nosotros no nos esperábamos nada, pero a final nos dieron el LOBO DE PLATA.
La verdad es que, me lo pasé muy bien, aprendí cosas interesantes y además perdimos dos días de clase. Y si alguna vez pudiera repetir esta experiencia, la repetiría.

Marta Rubio Latasa